Para la beatificación del Padre Pio de Pietrelcina (02/05/1999), las monjas de la abadía benedictina de Rossano, en Italia, confeccionaron una casulla para san Juan Pablo II, inspirada en las obras de Fra Angelico.
La abadesa de Rossano explicó que normalmente tardan veinte días en bordar una casulla, pero esta les tomó cuatrocientos treinta días. Más de un año de trabajo.
Además de usarla en la beatificación del Padre Pio, san Juan Pablo II la vistió en a fiesta del Bautismo del Señor de los años 2000 y 2001; en las misas del día de Pascua de los años 2000, 2001, 2003 y 2004; y en la misa por el L aniversario de la proclamación del dogma de la Asunción de la B.V. María (01/11/2000).