Hacia finales de los años ochenta del siglo pasado se elaboraron para san Juan Pablo II uno de los juegos de ornamentos más completos que hay en la sacristía papal, pues consta de mitra, casulla, pluvial, dalmáticas y paño de hombros. Fueron confeccionados por las hermanas benedictinas del Monasterio de Santa María de Rossano, en Florencia.
Este juego ha sido usado, además de por el santo papa polaco, por Benedicto XVI y por Francisco.
La mitra
La casulla
La capa pluvial
El paño de hombros