Antiguamente, los cardenales cuando visitaban a un jefe de estado o en otras ceremonias civiles, de acuerdo a las costumbres locales, usaban el hábito civil extraordinario.
Este consistía en la sotana roja (normalmente usada con el hábito coral), la faja coral (antiguamente con borlas doradas), muceta roja (normalmente usada con hábito coral), cruz pectoral colgada con cadena (normalmente usada con el hábito piano), el ferraiolo (normalmente usado con hábito piano), y el solideo rojo.
En los periodos de Sede Vacante y el Viernes Santo la faja y el ferraiolo eran de lana, y la sotana y la muceta cambiaban el rojo por el púrpura.
Las normas actuales sobre la vestidura de obispos (Instrucción Ut sive sollicite y Ceremonial de los Obispos) ya no prevén su uso. Sin embargo, algunos cardenales siguen usándolo.